jueves, 27 de noviembre de 2014

AYOTZINAPA “CUNA DE LA CONCIENCIA SOCIAL” EN BUSCA DE LOS 43 NORMALISTAS DESAPARECIDOS












INTRODUCCIÓN

Ayotzinapa lugar de sueños y metas por alcanzar, lugar donde la solidaridad es uno de los valores que se manifiesta hoy en día. Hablar de los 43 normalistas desaparecidos y dónde están es empezar a indagar sobre quiénes eran, que querían en la vida y de ahí buscar las causas que generaron sus desapariciones  y supuestas muertes.

El 26 de septiembre es una fecha que ha tenido muchas repercusiones, buscando esclarecer hechos, castigar a culpables pero sobre todo manteniendo la esperanza de encontrar a los 43 normalistas con vida.

En el presente informe se busca conocer más a fondo sobre el tema, tomar conciencia de las circunstancias de la vida, pero sobre todo tiene objetivo específico que como universitarios que somos sepamos enfrentar a la vida con conocimiento.
 ESCUELA NORMAL RURAL “RAÚL ISIDRO BURGOS” DE AYOTZINAPA
Ayotzinapa “cuna de la conciencia social” lugar apartado de la sociedad, del gobierno y de sueños tardados, así es la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, fundada en 1926 en la comunidad de Ayotzinapa, en el centro de Guerrero, es una institución formadora de profesores de educación  primaria, bilingüe y educación física, los egresados aspiran a ser maestros rurales en comunidades marginadas del país.
 Se ubica a 20 minutos de la ciudad de Chilpancingo, luego de caminos de terracería y sobre veredas empedradas que suben a la montaña. Un arco de piedra da la bienvenida al colegio que más bien es una ciudad de jóvenes que no superan los 25 años.
La idea de graduarse algún día como maestros y darle un futuro a sus familias y a su país los mantenían día a día con la esperanza de avanzar lento, pero caminando firme para poder llegar a algún lugar, pero otros simplemente no alcanzaron las metas propuestas.

SUCESOS OCURRIDOS EL 26 DE SEPTIEMBRE
SUPOSICIONES DE LO QUE SUCEDIO
El 26 de septiembre de 2014 es una fecha que no se olvidara fácilmente, fecha que ha dejado huella, pero nos ha vuelto más fuerte y con ganas de luchar preparándonos con educación día a día. Un claro ejemplo de superación son los normalistas de los que hoy no se sabe dónde están, aquellos que  sus ilusiones y metas los mantenían vivos .Entre las causas de su aprehensión destacan las más justificadas, las cuales son:
1.    El 26 de septiembre estudiantes de la Normal de Ayotzinapa tomaron dos camiones para llegar a Iguala, lugar en el que tomaron otras dos unidades, adonde se dirigían —según testimonios de algunos estudiantes— a tomar dos camiones que les faltaban para viajar a sus prácticas a la Costa chica de Guerrero, así como enviar una comitiva a la Ciudad de México a la marcha conmemorativa del 2 de octubre.
Sin embargo, ya en Iguala, el alcalde José Luis Abarca ordenó a la policía municipal detenerlos, y para ello pedir apoyo a la policía de Cocula (un municipio cercano), al suponer que se dirigían a boicotear el acto de informe de gobierno de su esposa, María de los Ángeles Pineda. La simple intuición del de Iguala lo llevo a actuar  sin medidas lo que desencadeno un gran conflicto hasta la fecha.
2.    Verdad o mentira. De acuerdo a los testimonios de algunos de los jóvenes que sobrevivieron al atentado, los estudiantes viajaron a Iguala para manifestarse en contra de la esposa del alcalde, María de los Ángeles Pineda, quien por esos días realizaba proselitismo político en el marco de su informe de labores como presidenta del DIF estatal.
A partir de este testimonio se describe a los normalistas como violentos y capaces de tomar a la justicia por su propia mano, razón por la cual puede darle un giro inesperado a las investigaciones.
3.    Se dice que el grupo delictivo “Guerreros Unidos” propicio este acontecimiento como una forma de amenaza para Ayotzinapa, la cual siempre se ha caracterizado como un lugar de lucha social.
4.    Como una forma de solidaridad y conmemoración, el 26 de septiembre, un grupo de normalistas se trasladó hasta Iguala con el objetivo de recolectar fondos para asistir a la marcha del 2 de octubre que se realiza cada año en la capital de México para conmemorar la masacre de Tlatelolco. Pero durante su traslado fueron atacados tres veces consecutivas:
·         Primer ataque: Algunas versiones preliminares señalaron que los normalistas ingresaron al centro de Iguala por calle Galeana, donde fueron interceptados por disparos (al parecer al aire) de uno de los guardaespaldas de Ángeles Pineda y por policías municipales; este primer ataque, en el que resultaron heridos varios normalistas, causó pánico entre los asistentes al evento de la presidenta del DIF, lo que enfureció al presidente municipal de Iguala, José Luis Abarca.
Desde el primer ataque los normalistas llenos de pánico deseaban regresar a sus casas e hicieron hasta lo imposible para lograrlo pero unos encontraron la muerte y otros simplemente no regresaron.
·         Segundo ataque: Minutos después, tras presionar a los operadores de líneas de autobuses, los estudiantes lograron conseguir tres camiones para regresar a Ayotzinapa. Desde que salieron de la terminal de Iguala, las patrullas municipales intentaron cerrar el paso a los estudiantes y dispararon ráfagas intermitentes. Más adelante (a la altura de Avenida Álvarez) una patrulla (320) de la policía municipal bloqueó la avenida para impedir el avance de los tres camiones que los transportaba y otras patrullas más, rodearon a los camiones, mientras más de 30 policías se colocaron en posición de ataque.
·         Tercer ataque: Dos horas más tarde, cuando terminó la segunda agresión llegaron ambulancias a recoger a los heridos. Los normalistas lograron comunicarse con miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG) y citaron una conferencia de prensa para exigir la liberación de sus compañeros retenidos por la policía municipal.
 En ese momento otro comando armado emprendió el tercer ataque en el que murieron 2 estudiantes más: Julio César Ramírez Nava, cuyo cuerpo permaneció tres días sin ser reconocido, y Julio César Mondragón quien prefirió escapar durante el ataque y apareció desollado al día siguiente.
5.    Un fatídico 26 de septiembre por la noche, 80 estudiantes de la Normal Rural, Raúl Isidro Burgos se dirigían a Chilpancingo desde la ciudad de Iguala para un boteo que realizarían al día siguiente. Iban a bordo de tres autobuses secuestrados de la empresa Costa Line.
Al salir de la central de autobuses, policías municipales los señalaron como delincuentes, intentaron cerrarles el paso con patrullas y les dispararon; los estudiantes bajaron de las unidades pero la policía municipal no dejó de disparar, ni de perseguirlos, hiriendo a uno de ellos, de nombre Aldo Gutiérrez Solano (quien ahora tiene muerte cerebral). Aproximadamente 20 estudiantes que se encontraban en el autobús de atrás también fueron sometidos, acostándolos en el piso para posteriormente subirlos a unas patrullas.
Los estudiantes se dispersaron por las calles para huir de los balazos, después de 40 minutos regresaron al lugar de los hechos y convocaron a algunos medios de comunicación para informar de lo sucedido. De pronto llegó una camioneta RAM color rojo de la que bajaron varias personas con armas largas que empezaron a disparar ráfagas en contra de la multitud, matando a dos estudiantes e hiriendo a 5 personas más.
A veces la incompetencia por parte de algunos policías municipales, cegados por su supremacía e incompetencia toman la justicia de acuerdo a su manera y no conforme a la ley. Tal es este caso ocurrido en los ataques y desaparición de los normalistas, estos detuvieron y trataron como delincuentes a base de violencia a los normalistas sin conocer primero  las causas de las ordenes, primero actuaron y luego pensaron pero esta vez sus acciones trajo consecuencias graves que ni la ley los ampara por ser trabajadores del gobierno.   

       
LOS NOMBRES DE LOS NORMALISTAS
1.    Abel García Hernández
2.    Abelardo Vázquez Peniten
3.    Adán Abrajan de la Cruz
4.    Alexander Mora Venancio
5.    Antonio Santana Maestro
6.    Benjamín Ascencio Bautista
7.    Bernardo Flores Alcaraz
8.    Carlos Iván Ramírez Villarreal
9.    Carlos Lorenzo Hernández Muñoz
10.  César Manuel González Hernández
11.   Christian Alfonso Rodríguez Telumbre
12.  Christian Tomas Colon Garnica
13.  Cutberto Ortiz Ramos
14.  Dorian González Parral
15.   Emiliano Alen Gaspar de la Cruz
16.   Everardo Rodríguez Bello
17.  Felipe Arnulfo Rosas
18.  Giovanni Galindes Guerrero
19.   Israel Caballero Sánchez
20.   Israel Jacinto Lugardo
21.  Jesús Jovany Rodríguez Tlatempa
22.  Jonas Trujillo González
23.  Jorge Álvarez Nava
24.  Jorge Aníbal Cruz Mendoza
25.   Jorge Antonio Tizapa Legideño
26.  Jorge Luis González Parral
27.  José Ángel Campos Cantor
28.  José Ángel Navarrete González
29.  José Eduardo Bartolo Tlatempa
30.  José Luis Luna Torres
31.  Jhosivani Guerrero de la Cruz
32.  Julio César López Patolzin
33.  Leonel Castro Abarca
34.  Luis Ángel Abarca Carrillo
35.  Luis Ángel Francisco Arzola
36.  Magdaleno Rubén Lauro Villegas
37.  Marcial Pablo Baranda
38.  Marco Antonio Gómez Molina
39.  Martín Getsemany Sánchez García
40.  Mauricio Ortega Valerio
41.  Miguel Ángel Hernández Martínez
42.  Miguel Ángel Mendoza Zacarías
43.  Saúl Bruno García

NOMBRE DE LOS RESPONSABLES INTELECTUALES
EL 22 de octubre, según las investigaciones de la PGR, los principales sospechosos de ser los responsables intelectuales de la matanza son: el alcalde de Iguala, José Luis Abarca; María de los Ángeles Pineda, su esposa; Felipe Flores Vázquez, su jefe de seguridad; César Nava González; subdirector de la policía de Cocula y “El Gil”, cabecilla del grupo “Guerreros Unidos” ; incluso reconoce a María de los Ángeles Pineda como la principal operadora y hermana de tres operadores del cártel de los Beltrán Leyva.
Coraje, repulsión, odio son las primeras impresiones que da como resultado al escuchar estos nombres de personas sin corazón,  sin sentimientos, al haber operado un crimen contra los normalistas. Aún no se ha comprobado que sean ellos los culpables pero todas las investigaciones arrojan ser ellos los principales sospechosos.
Murillo Karam confirma que Abarca fue quien ordenó el ataque contra los estudiantes. José Luis Abarca, se encuentra prófugo de la justicia, antes de darse a la fuga declaró que él no sabía nada de disparos, ni de desapariciones. Posteriormente pidió una licencia de 30 días para no interferir con la investigación y finalmente huyó. El 4 de noviembre, durante la madrugada, poco antes de las 4 horas, autoridades confirmaron la detención de Abarca y su esposa en una casa de Iztapalapa, en el DF.

CONCLUSIÓN
La realización de este informe logro recabar los aspectos más importantes del caso Ayotzinapa, conociendo y argumentando así los factores que propiciaron y desencadenaron hasta la fecha investigaciones para conocer el paradero de los normalistas y llegar a entender suposiciones que aún no han sido comprobadas.
Los 43 normalistas aun no aparecen, los principales sospechosos ya están presos pero una esperanza de vida  es lo que mantiene a todos en espera de la aparición de los 43 normalistas con vida.
Se desea continuar con esta investigación para comprobar las hipótesis antes mencionadas durante el desarrollo de este informe y así poder esclarecer hechos para una buena información.