INTRODUCCIÓN
Ayotzinapa lugar de sueños
y metas por alcanzar, lugar donde la solidaridad es uno de los valores que se
manifiesta hoy en día. Hablar de los 43 normalistas desaparecidos y dónde están
es empezar a indagar sobre quiénes eran, que querían en la vida y de ahí buscar
las causas que generaron sus desapariciones
y supuestas muertes.
El 26 de septiembre es una
fecha que ha tenido muchas repercusiones, buscando esclarecer hechos, castigar
a culpables pero sobre todo manteniendo la esperanza de encontrar a los 43
normalistas con vida.
En el presente informe se
busca conocer más a fondo sobre el tema, tomar conciencia de las circunstancias
de la vida, pero sobre todo tiene objetivo específico que como universitarios
que somos sepamos enfrentar a la vida con conocimiento.
ESCUELA
NORMAL RURAL “RAÚL ISIDRO BURGOS” DE AYOTZINAPA
Ayotzinapa “cuna de la
conciencia social” lugar apartado de la sociedad, del gobierno y de sueños
tardados, así es la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, fundada en 1926 en
la comunidad de Ayotzinapa, en el centro de Guerrero, es una institución formadora
de profesores de educación primaria, bilingüe y educación física, los egresados aspiran a ser
maestros rurales en comunidades marginadas del país.
Se ubica a 20 minutos de la ciudad de Chilpancingo, luego
de caminos de terracería y sobre veredas empedradas que suben a la montaña. Un
arco de piedra da la bienvenida al colegio que más bien es una ciudad de jóvenes
que no superan los 25 años.
La idea de graduarse algún
día como maestros y darle un futuro a sus familias y a su país los mantenían
día a día con la esperanza de avanzar lento, pero caminando firme para poder
llegar a algún lugar, pero otros simplemente no alcanzaron las metas
propuestas.
SUCESOS
OCURRIDOS EL 26 DE SEPTIEMBRE
SUPOSICIONES
DE LO QUE SUCEDIO
El 26 de septiembre de 2014
es una fecha que no se olvidara fácilmente, fecha que ha dejado huella, pero
nos ha vuelto más fuerte y con ganas de luchar preparándonos con educación día
a día. Un claro ejemplo de superación son los normalistas de los que hoy no se
sabe dónde están, aquellos que sus
ilusiones y metas los mantenían vivos .Entre las causas de su aprehensión
destacan las más justificadas, las cuales son:
1.
El
26 de septiembre estudiantes de la Normal de Ayotzinapa tomaron dos
camiones para llegar a Iguala, lugar en el que tomaron otras
dos unidades, adonde se dirigían —según testimonios de algunos
estudiantes— a tomar dos camiones que les faltaban para viajar a sus
prácticas a la Costa chica de Guerrero, así como enviar una comitiva a la
Ciudad de México a la marcha conmemorativa del 2 de octubre.
Sin
embargo, ya en Iguala, el alcalde José Luis Abarca ordenó a la policía
municipal detenerlos, y para ello pedir apoyo a la policía de Cocula (un
municipio cercano), al suponer que se dirigían a boicotear el acto de informe
de gobierno de su esposa, María de los Ángeles Pineda. La simple intuición del de
Iguala lo llevo a actuar sin medidas lo
que desencadeno un gran conflicto hasta la fecha.
2. Verdad o mentira. De
acuerdo a los testimonios de algunos de los jóvenes que sobrevivieron al
atentado, los estudiantes viajaron a Iguala para manifestarse en contra de la
esposa del alcalde, María de los Ángeles Pineda, quien por esos días realizaba
proselitismo político en el marco de su informe de labores como presidenta del
DIF estatal.
A partir de este
testimonio se describe a los normalistas como violentos y capaces de tomar a la
justicia por su propia mano, razón por la cual puede darle un giro inesperado a
las investigaciones.
3. Se dice que el
grupo delictivo “Guerreros Unidos” propicio este acontecimiento como una forma
de amenaza para Ayotzinapa, la cual siempre se ha caracterizado como un lugar
de lucha social.
4. Como una forma
de solidaridad y conmemoración, el 26 de septiembre, un grupo de normalistas se
trasladó hasta
Iguala con el objetivo de recolectar fondos para asistir a la marcha del 2 de
octubre que se realiza cada año en la capital de México para conmemorar la
masacre de Tlatelolco. Pero durante su traslado fueron atacados tres veces consecutivas:
·
Primer ataque: Algunas
versiones preliminares señalaron que los normalistas ingresaron al centro de
Iguala por calle Galeana, donde fueron interceptados por disparos (al parecer
al aire) de uno de los guardaespaldas de Ángeles Pineda y por policías
municipales; este primer ataque, en el que resultaron heridos varios
normalistas, causó pánico entre los asistentes al evento de la presidenta del
DIF, lo que enfureció al presidente municipal de Iguala, José Luis Abarca.
Desde el primer ataque los normalistas
llenos de pánico deseaban regresar a sus casas e hicieron hasta lo imposible
para lograrlo pero unos encontraron la muerte y otros simplemente no
regresaron.
·
Segundo ataque:
Minutos después, tras presionar a los operadores de líneas de autobuses, los
estudiantes lograron conseguir tres camiones para regresar a Ayotzinapa. Desde
que salieron de la terminal de Iguala, las patrullas municipales intentaron
cerrar el paso a los estudiantes y dispararon ráfagas intermitentes. Más
adelante (a la altura de Avenida Álvarez) una patrulla (320) de la policía
municipal bloqueó la avenida para impedir el avance de los tres camiones que
los transportaba y otras patrullas más, rodearon a los camiones, mientras más
de 30 policías se colocaron en posición de ataque.
·
Tercer ataque: Dos horas más tarde, cuando terminó la segunda agresión
llegaron ambulancias a recoger a los heridos. Los normalistas lograron
comunicarse con miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la
Educación en Guerrero (CETEG) y citaron una conferencia de prensa para exigir
la liberación de sus compañeros retenidos por la policía municipal.
En ese momento otro comando
armado emprendió el tercer ataque en el que murieron 2 estudiantes más: Julio
César Ramírez Nava, cuyo cuerpo permaneció tres días sin ser reconocido,
y Julio César Mondragón quien prefirió
escapar durante el ataque y apareció desollado al día siguiente.
5. Un
fatídico 26 de septiembre por la noche, 80 estudiantes de la Normal Rural,
Raúl Isidro Burgos se dirigían a Chilpancingo desde la ciudad de Iguala para un boteo que realizarían al día siguiente.
Iban a bordo de tres autobuses secuestrados de la empresa Costa Line.
Al salir de la central de autobuses, policías municipales los
señalaron como delincuentes, intentaron cerrarles el paso con patrullas y
les dispararon; los estudiantes bajaron de las
unidades pero la policía municipal no dejó de disparar, ni de
perseguirlos, hiriendo a uno de ellos, de nombre Aldo Gutiérrez
Solano (quien ahora tiene muerte cerebral). Aproximadamente 20 estudiantes que se encontraban en el autobús de atrás también fueron
sometidos, acostándolos en el piso para posteriormente subirlos a unas patrullas.
Los estudiantes se
dispersaron por las calles para huir de los balazos, después de 40 minutos
regresaron al lugar de los hechos y convocaron a algunos medios de comunicación
para informar de lo sucedido. De pronto llegó una camioneta RAM
color rojo de la que bajaron varias personas con armas
largas que empezaron a disparar ráfagas en contra de la multitud, matando
a dos estudiantes e hiriendo a 5 personas más.
A
veces la incompetencia por parte de algunos policías municipales, cegados por
su supremacía e incompetencia toman la justicia de acuerdo a su manera y no
conforme a la ley. Tal es este caso ocurrido en los ataques y desaparición de
los normalistas, estos detuvieron y trataron como delincuentes a base de
violencia a los normalistas sin conocer primero las causas de las ordenes, primero actuaron y
luego pensaron pero esta vez sus acciones trajo consecuencias graves que ni la
ley los ampara por ser trabajadores del gobierno.
LOS NOMBRES DE LOS NORMALISTAS
1.
Abel
García Hernández
2.
Abelardo
Vázquez Peniten
3.
Adán
Abrajan de la Cruz
4.
Alexander
Mora Venancio
5.
Antonio
Santana Maestro
6.
Benjamín
Ascencio Bautista
7.
Bernardo
Flores Alcaraz
8.
Carlos
Iván Ramírez Villarreal
9.
Carlos
Lorenzo Hernández Muñoz
10.
César
Manuel González Hernández
11.
Christian Alfonso Rodríguez Telumbre
12.
Christian
Tomas Colon Garnica
13.
Cutberto
Ortiz Ramos
14.
Dorian
González Parral
15.
Emiliano Alen Gaspar de la Cruz
16.
Everardo Rodríguez Bello
17.
Felipe
Arnulfo Rosas
18.
Giovanni
Galindes Guerrero
19.
Israel Caballero Sánchez
20.
Israel Jacinto Lugardo
21.
Jesús
Jovany Rodríguez Tlatempa
22.
Jonas
Trujillo González
23.
Jorge
Álvarez Nava
24.
Jorge
Aníbal Cruz Mendoza
25.
Jorge Antonio Tizapa Legideño
26.
Jorge
Luis González Parral
27.
José
Ángel Campos Cantor
28.
José
Ángel Navarrete González
29.
José
Eduardo Bartolo Tlatempa
30.
José
Luis Luna Torres
31.
Jhosivani
Guerrero de la Cruz
32.
Julio
César López Patolzin
33.
Leonel
Castro Abarca
34.
Luis
Ángel Abarca Carrillo
35.
Luis
Ángel Francisco Arzola
36.
Magdaleno
Rubén Lauro Villegas
37.
Marcial
Pablo Baranda
38.
Marco
Antonio Gómez Molina
39.
Martín
Getsemany Sánchez García
40.
Mauricio
Ortega Valerio
41.
Miguel
Ángel Hernández Martínez
42.
Miguel
Ángel Mendoza Zacarías
NOMBRE
DE LOS RESPONSABLES INTELECTUALES
EL 22 de octubre, según las investigaciones de la PGR, los principales
sospechosos de ser los responsables intelectuales de la matanza son: el
alcalde de Iguala, José Luis Abarca; María de los Ángeles Pineda, su esposa;
Felipe Flores Vázquez, su jefe de seguridad; César Nava González; subdirector
de la policía de Cocula y “El Gil”, cabecilla del grupo “Guerreros Unidos” ; incluso reconoce a María
de los Ángeles Pineda como la principal operadora y hermana de tres operadores del cártel
de los Beltrán Leyva.
Coraje, repulsión, odio son
las primeras impresiones que da como resultado al escuchar estos nombres de
personas sin corazón, sin sentimientos,
al haber operado un crimen contra los normalistas. Aún no se ha comprobado que
sean ellos los culpables pero todas las investigaciones arrojan ser ellos los
principales sospechosos.
Murillo Karam confirma
que Abarca
fue quien ordenó el ataque
contra los estudiantes. José Luis Abarca, se
encuentra prófugo de la justicia, antes de darse a la fuga declaró que él no sabía nada de disparos, ni de desapariciones. Posteriormente pidió una
licencia de 30 días para no interferir con la investigación y finalmente huyó. El 4 de
noviembre, durante la madrugada, poco antes de las 4 horas, autoridades
confirmaron la detención de Abarca y su esposa en una casa de
Iztapalapa, en el DF.
CONCLUSIÓN
La
realización de este informe logro recabar los aspectos más importantes del caso
Ayotzinapa, conociendo y argumentando así los factores que propiciaron y
desencadenaron hasta la fecha investigaciones para conocer el paradero de los
normalistas y llegar a entender suposiciones que aún no han sido comprobadas.
Los
43 normalistas aun no aparecen, los principales sospechosos ya están presos
pero una esperanza de vida es lo que
mantiene a todos en espera de la aparición de los 43 normalistas con vida.
Se
desea continuar con esta investigación para comprobar las hipótesis antes
mencionadas durante el desarrollo de este informe y así poder esclarecer hechos
para una buena información.